La Zona de Confort

La zona de confort es el “espacio” mental en el cual nos sentimos cómodos. Esto no quiere necesariamente decir que todo lo que hay en esa zona lo valoremos como positivo, ya que es muy normal que estemos viviendo una situación que percibimos como negativa, pero a la cual nos hemos acostumbrado, hemos aprendido a convivir con ella y nos sentimos relativamente cómodos en su presencia.

La zona de confort es nuestra zona de seguridad, una zona en la que nos sentimos a salvo y que, por lo tanto, vamos a tratar de buscar constantemente. Todo aquello que se encuentra fuera de nuestra zona de confort lo valoramos como potencialmente peligroso y trataremos de evitarlo a toda costa.

Como dice la diapositiva 2, la emoción que se encuentra en el transfondo de todos nuestros comportamientos defensivos y reactivos es el miedo.

El problema es que si no nos enfrentamos a nuestros miedos mediante un trabajo consciente, la zona de confort se va a ir haciendo cada día más pequeña y nuestra vida va a ser cada vez más repetitiva, ya que estaremos buscando siempre el mismo tipo de situaciones y huyendo de todas aquellas situaciones que percibamos como peligrosas o amenazantes, lo sean realmente o no.

Esto se puede también hacer extensivo a la txalaparta y a la manera en la que nos enfrentamos a ella. Normalmente tocaremos la txalaparta de formas que sean compatibles con nuestra zona de confort y huiremos de aquellas formas que tengan relación con áreas de nuestra vida en las que no nos sentimos seguros. Y este es precisamente el fundamento en el que se basa este método de enseñanza de la txalaparta.